Un grupo de estudiantes que lidera la manifestación nacional contra el Gobierno de Nicaragua anunció sus deseos de paz, pero sin el presidente Daniel Ortega ni su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
“Queremos paz, sí, con un cambio sí, fuera Daniel Ortega, fuera Rosario Murillo”, dijo a periodistas un líder estudiantil de la Universidad Nacional Politécnica de Nicaragua (Upoli), que no quiso ser identificado.
PROTESTAS Y REPRESIÓN
Los estudiantes de la Upoli son los que más represión han sufrido de la Policía Nacional y grupos afines al Gobierno, desde que iniciaron las protestas, hace siete días.
La noche del domingo un fuerte dispositivo policial asaltó el campus de la Upoli, al este de Managua, donde lanzó balas de plomo de distinto calibre, denunciaron los estudiantes.
Para los estudiantes, ésta ya no es una lucha contra las medidas de seguridad social recientemente aprobadas y que Ortega anuló, en un intento fallido por que el país regresara a la calma.
Así como los estudiantes, miles de personas han protestado de manera simultánea en toda Nicaragua contra el Gobierno de Ortega, al que señalan de represor y corrupto.
LOS ORTEGA, PODER ABSOLUTO
La represión por parte de la Policía Nacional y grupos de choque oficialistas llamados “turbas”, han dejado al menos 27 fallecidos, 428 heridos, así como cientos de arrestados y desaparecidos, según datos de organizaciones no gubernamentales y la Cruz Roja Nicaragüense.
Los gobiernos de España, Alemania, Uruguay y Costa Rica se sumaron al pedido para poner fin a la violencia en Nicaragua. Además, Alemania condenó el uso de armas en las protestas y pidió esclarecer los casos de las víctimas fatales y el Instituto Nicaragüense de Desarrollo reprobó que el gobierno de Ortega se valga de fuerzas “paramilitares” para reprimir las protestas que ha habido en su contra.
El presidente Daniel Ortega, un líder de la revolución de 1979 que levantó la bandera de los oprimidos, ha gobernado su país con su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, con un poder casi absoluto.